La primavera es la época del año donde solemos empezar rutinas de desintoxicación y limpieza del cuerpo, especialmente del hígado, órgano que ejerce la función depurativa por excelencia. En el artículo de hoy veremos un protocolo de depuración hepática especialmente pensado para estas fechas. La primavera es un buen momento para esto ya que en los meses que la preceden solemos llevar una alimentación más pesada para el organismo (más fritos y grasas) y, con el frío del invierno, solemos permanecer más en interiores, exponiéndonos menos a la acción vivificadora del aire y del sol.
En la Medicina Tradicional China la primavera se asocia al elemento Madera y a los órganos del Hígado y la Vesícula biliar, así que también desde esta tradición encontramos la recomendación de realizar una limpieza hepática por estas fechas.
Sin embargo, cualquier época es buena para realizar un proceso de depuración hepática e incluir una serie de rutinas saludables en el día a día, así que si decides aplicar estos consejos en otoño, invierno o verano, encontrarás en ellos una fuente de salud y bienestar. También a nivel emocional es aconsejable introducir un proceso depurativo. Te hablo más abajo de ello.
Dieta para la depuración hepática primaveral
Lo primero para hacer una buena limpieza del hígado es limitar o eliminar tanto como sea posible los factores que lo sobrecargan. Por tanto, es recomendable:
- Reducir o eliminar el consumo de arroz blanco, pan blanco, azúcar refinado y edulcorantes.
- Reducir o eliminar las grasas saturadas (carnes, lácteos, fritos, etc.).
- Hacer actividad física. Se trata de moverse, por lo que la intensidad no es tan importante como poder sostener este hábito de forma placentera en el tiempo.
- Perder peso, sobre todo eliminar la grasa abdominal. Para esto nos puede ayudar una dieta basada en plantas, en la que predominen frutas y verduras de baja densidad calórica.
- Disminuir el consumo de fármacos hepatotóxicos como los corticoides, el paracetamol y el ibuprofeno.
- Reducir o eliminar el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas.
En términos generales, los alimentos y los nutrientes que más nos ayudarán a la depuración hepática son aquellos de origen vegetal, cocinados de forma ligera (evitando frituras), ricos en fibra y que contengan pocas grasas (y estas sean saludables). Lo ideal es que en tu dieta predominen:
- Alimentos frescos, ligeros e integrales que alcalinicen y favorezcan la función hepatobiliar, como las verduras de sabor un poco amargo, como la col rizada, achicoria, diente de león, rúcula…
- El sabor ácido-agrio en pequeñas cantidades. Es el sabor de los limones, el yogur y las frutas ácidas, y al igual que pasa con el salado, con moderación la acidez estimula la digestión. Además, el limón contiene una gran cantidad de vitamina C, que potencia la absorción del hierro. Los ácidos estimulan las secreciones biliares, por lo que ayudan a digerir las grasas.
- Cocciones ligeras y con poco o ningún aceite: al vapor, salteados, escaldados y crudos.
- Alimentos ricos en vitaminas del grupo B (cereales integrales, legumbres, frutos secos), ácidos grasos esenciales omega 3 (algas, semillas de lino, de chía y de cáñamo, nueces, aceites de primera prensión de semillas y frutos secos) y el aminoácido triptófano (plátano, semillas de calabaza y sésamo, tofu, soja, chocolate, lechuga, piña, dátiles, cacahuetes).
- Alimentos ricos en colina, ya que esta sustancia ayuda a metabolizar la grasa (y por lo tanto ayuda al hígado). La colina está presente en soja, col, judías mung, lentejas, huevos, habas, ajo, cebollas, berenjenas, apio, borrajas, ortiga, semillas de sésamo, girasol y lino, comino, cardamomo, anís e hinojo.
Los mejores alimentos depurativos
Tanto las frutas como las verduras tienen un alto contenido en nutrientes y son muy ricas en fibra y agua, que son dos de los depurativos más potentes para nuestro organismo. Los alimentos depurativos más comunes y potentes son el limón, la alcachofa, la papaya, los frutos del bosque, la endivia, el apio, los espárragos, los berros, la uva, el ajo, la cebolla, el jengibre, el hinojo, el brócoli, la cebolla, los rábanos, las coles, las setas, la calabaza, la remolacha…
Verás que la mayoría de estos alimentos tienen su momento óptimo en primavera: esto nos indica que naturalmente esta es la época de la depuración hepática (y del resto del organismo) por excelencia.
Sin duda, entre los mejores alimentos a utilizar en los caldos y recetas depurativas encontramos el apio y la cebolla. El apio es un gran laxante y muy diurético con lo que nos ayudará a la eliminación de líquidos; además, tiene un potente efecto saciante, con lo que su consumo nos hará sentir llenos y, gracias a su riqueza en zinc y fósforo es un relajante del sistema nervioso. La cebolla también es muy depurativa y diurética y tiene un alto contenido en potasio lo que, además, nos ayudará en la desintoxicación del hígado y del sistema linfático.
Un superalimento muy recomendado para la depuración hepática de la primavera es la alcachofa. La alcachofa ayudar a mantener la salud del hígado al reducir las enzimas hepáticas y protegerlo del estrés oxidativo y el daño causado por toxinas. Esta planta reduce la inflamación, mantiene el tracto digestivo limpio y estable gracias a su alto contenido de fibra y nos ayuda a mantenernos en un peso saludable. En un ensayo clínico doble ciego y aleatorio, se dio a un grupo de pacientes con enfermedad del hígado graso no alcohólico 600 mg de extracto de hoja de alcachofera seca diariamente durante 8 semanas. Los pacientes experimentaron una mejora en la salud del hígado tanto en parámetros de ultrasonido como en marcadores séricos, incluyendo la alanina aminotransferasa, la aspartato aminotransferasa y la bilirrubina total. Además, se redujeron sus niveles de azúcar en sangre, colesterol, triglicéridos e índice de masa corporal, en comparación con el grupo placebo. (Panahi, Yunes et al. “Efficacy of artichoke leaf extract in non-alcoholic fatty liver disease: A pilot double-blind randomized controlled trial” Phytother Res. 2018 Jul;32(7):1382-1387).
Otros alimentos muy recomendables los describo en el artículo de Depuración hepática para el otoño.
Dos recetas depurativas para tu hígado
Caldo depurativo
Ingredientes: 2 cebollas, unas hojas de col o lechuga, 1 rama de apio, un trozo de alga wakame, 2 litros de agua. Además, añadiremos 1 limón exprimido por cada ración de caldo.
Preparación: se hierven todos los ingredientes juntos durante una media hora y luego se cuela.
Se toma un vaso antes de cada comida añadiéndole un limón exprimido.
Los ingredientes sobrantes de la preparación los puedes utilizar para la guarnición del mediodía rehogándolos en la sartén con un poco de aceite o caldo de verduras y ajo. También puedes hacer un puré o añadir un poco de agua y tomarlas como si fuera sopa.
No son los alimentos los que realizan la función de depurar, sino nuestro propio organismo. Un buen caldo depurativo favorece la hidratación y la diuresis y elimina el exceso de líquido.
Carpaccio de alcachofa
Ingredientes: 2 alcachofas grandes y duras, 1 tomate maduro rallado, 1 lima, 1 limón, 1 pizca de orégano, 1 pizca de pimienta blanca, aceite y sal.
Preparación: este carpaccio tiene una elaboración muy sencilla. Lo primero es pelar y cortar muy finas las alcachofas de forma longitudinal. Conforme las vamos cortando, las rociamos de limón y lima, que previamente habremos exprimido, y las dejamos macerar unos 30 minutos aprox.
En un plato llano ponemos el tomate rallado y encima colocamos las alcachofas. Una vez colocadas salpimentamos y rociamos ligeramente de aceite.
Por último, ponemos el orégano y ya lo tendremos listo para comer.
Es habitual servir el carpaccio con queso parmesano, pero si estás realizando una dieta depurativa, es preferible utilizar especias o hierbas frescas y ligeras como el orégano.
Fitoterapia para cuidar el hígado
Tenemos a nuestra disposición un abanico muy amplio de plantas medicinales con propiedades muy beneficiosas para la depuración hepática y del organismo. Las propiedades que más nos interesan son las coleréticas (aumentan la secreción de bilis y la fluidifican), colagogas (estimulan el vaciamiento de la vesícula biliar), hepatoprotectoras (ayudan a proteger el hígado de los agentes externos), antioxidantes (protegen al organismo del daño de los radicales libres) y diuréticas (estimulan la eliminación de agua). Todas estas sirven para proteger las células hepáticas y estimular su regeneración, algunas veces comprometida a causa de la gran cantidad de radicales libres producidos por las reacciones hepáticas.
Algunas de las plantas medicinales con acción antioxidante, hepatoestimulante y hepatoprotectora más destacadas y empleadas en procesos de depuración hepática y aprobadas por organismos de regulación como la Comisión Europea, EMA (European Medicines Agency), ESCOP (European Scientific Cooperative On Phytotherapy) y OMS (Organización Mundial de la Salud) son las siguientes:
- Hoja de boldo (Peumus boldus).
- Fruto de cardo mariano (Silybum marianum).
- Partes aéreas y raíz de diente de león (Taraxacum campylodes).
- Hoja de alcachofera (Cynara scolymus).
- Sumidad florida de vara de oro (Solidago virgaurea).
- Raíz de rábano negro (Raphanus raphanistrum sativus).
- Raíz de achicoria (Cichorium intybus).
- Raíz de regaliz (Glycyrrhiza glabra).
Receta de tisana depurativa hepática
Una tisana es un tipo de infusión que emplea varios componentes vegetales. Cualquiera de las plantas medicinales que he listado antes es una buena candidata para tomar en infusión común o en forma de extracto, que podremos encontrar en muchas farmacias y herbolarios. Sin embargo, si buscas un preparado que combine de la forma más eficaz las distintas propiedades de estas plantas, esta es una de las mejores recetas que encontrarás. Es fácil conseguir todos estos ingredientes en comercios especializados, pero si alguno de ellos te falta, puedes reemplazarlo añadiendo un poco más de las otras plantas.
En un bote de cristal mezcla las siguientes plantas secas en las proporciones indicadas:
- 25% Hoja de boldo (Peumus boldus).
- 20% Hoja de alcachofera (Cynara scolymus).
- 20% Fruto de cardo mariano (Silybum marianum).
- 20% Sumidad florida de vara de oro (Solidago virgaurea).
- 15% Raíz de regaliz (Glycyrrhiza glabra).
Añade una cucharadita de la mezcla de plantas (2-3 g aprox.) por taza de agua (200 ml aprox.) a temperatura cercana al punto de ebullición. Tapa la taza y deja reposar durante 10 minutos.
Un truco para activar al máximo sus propiedades: rehidratar el material vegetal antes de ponerlo en contacto directo con el agua caliente. Para ello, pones la mezcla de plantas (2-3 g) a unos pocos mililitros de agua tibia (20 ml aprox.) y dejas macerar el preparado durante 5-10 minutos. Después incorporas el agua cercana al punto de ebullición hasta completar los 200 ml o la taza de agua, sin retirar el agua tibia incorporada anteriormente, tapando el preparado y dejándolo reposar durante 10 minutos. Esta es la mejor manera de aprovechar todo lo que las distintas plantas pueden ofrecernos.
Toma tres tazas al día de esta tisana separadas de las comidas. La primera taza en ayunas por la mañana. Podemos tomarla hasta tres meses seguidos.
Precauciones: no tomar esta tisana si se sufre alergia a cualquiera de las familias botánicas de las plantas medicinales empleadas. No se recomienda en casos de obstrucción de los conductos biliares o enfermedad hepática grave. En estos casos es imprescindible el asesoramiento del profesional sanitario correspondiente. No existe suficiente evidencia sobre su seguridad en embarazo, lactancia y niños menores de 14 años, por lo tanto, se desaconseja su uso en estos casos.
Depuración del hígado y las emociones
La depuración hepática también tiene efectos a nivel emocional, sobre todo si observamos el cuidado del hígado desde el prisma de aquellas emociones regidas por este órgano. Esta perspectiva proviene de la Medicina Tradicional China, y nos dice que el Hígado está relacionado con la rabia y la ira.
Lo que nos indica la MTC sobre la primavera y sus elementos asociados es que cuando todos los órganos y energías están en equilibrio nos sentimos creativos, dinámicos, flexibles e intuitivos; sin embargo, en desequilibrio experimentamos impaciencia, agresividad, intolerancia, rabia, enfado, rigidez, frustración. El papel que juega el Hígado es el de procesar la gran energía que se despierta en primavera para la creatividad.
En cambio, cuando no es la creatividad sino la ira la que predomina, la persona se altera fácilmente por las frustraciones y los obstáculos, incapaz de controlar adecuadamente sus sentimientos. Es volátil y se comporta caótica e impulsivamente. Oscila entre el interés apasionado y la indiferencia apagada. Estas emociones inestables y las reacciones imprevisibles son el resultado de un estado de tensión generalizada. Este tipo de persona lleva a menudo una doble vida. Generalmente practica una férrea autodisciplina para mantener la compostura y el control sobre sí misma. Pero cuando el estrés aumenta, o cuando se relaja y pierde las inhibiciones, puede explotar de rabia o caer en un comportamiento irreflexivo e impulsivo.
Alguien cuyas reacciones son negativas o está habitualmente enfadado o irritado por cualquier cosa suele tener un hígado maltrecho. Así como la sobrecarga del hígado está vinculado a la ira, el bloqueo y la frustración; la debilidad de la vesícula biliar correlaciona además con dudas, falta de claridad mental y dificultad para tomar decisiones. Si se trabaja para mejorar las funciones de este sistema, notaremos efectos a nivel comportamental.
Si nos reconocemos en alguno de estos sentimientos, sea primavera o cualquier otra época del año, es un buen momento de poner el foco de atención en cómo nos sentimos y nutrirnos emocionalmente, a la par que aplicamos este proceso de desintoxicación hepática en nuestro cuerpo físico. Con conciencia todos los mensajes que nos envía el cuerpo son una muy útil fuente de información y de crecimiento, y esa rabia, frustración o indecisión puede convertirse en la creatividad transformadora y sanadora.
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Comments
Me alegro mucho de que ya estés mejor. No sabes lo que te entiendo, me operaron este lunes y está siendo mucho más doloroso e incómodo de lo que pensaba y me dijeron. Como también estoy tomando mucha medicación me viene genial tu artículo ahora mismo. Mil gracias por compartir tanto
Hola preciosa! Te mando muchos ánimos, sé bien por lo que estás pasando! Yo creo que los médicos con toda su buena intención nos dicen que va a ser más llevadero de lo que acaba siendo, pero lo entiendo porque de no ser así a lo mejor estaríamos mucho más nerviosos cuando se acercara la fecha (al menos yo lo habría estado). Aun así preferiría haberlo sabido para poder prepararme mejor, pero bueno, medicación y después a cuidar el hígado, que tanto ha trabajado por nosotros. Gracias a ti por tus palabras y tu presencia.
Gracias por tantos y tan sabios consejos, lo que estaba necesitando en estos momentos. Me voy a comprar todo lo que necesito para limpiar de forma sana y segura mi hígado. Mil gracias bella!
Qué bien que te sirva! A mí también me está viniendo muy bien ahora mismo, para limpiar el hígado de toda la medicación que he estado tomando (bendita medicación!). Un abrazo y gracias a ti, Eva